- El autor realiza un repaso histórico sobre la evolución del derecho al voto en México, destacando las reformas electorales más recientes y su impacto en el fortalecimiento de la democracia y la participación ciudadana de los mexicanos.
Con miras a las elecciones del próximo 2 de junio, es relevante examinar la evolución del derecho al voto en México.
Si bien este concepto tiene raíces que se remontan a la Antigua Grecia, su desarrollo ha sido gradual y diverso en cada país, reflejando su contexto histórico y social.
En el caso específico de México, destacan varios hitos que han marcado un antes y un después en la sociedad mexicana en relación al voto.
Revolución Mexicana y la Constitución de 1917
Tras la Revolución Mexicana, se promulgó la actual Constitución Mexicana, la cual estableció el sufragio efectivo y la no reelección como principios fundamentales, en respuesta al descontento social por elecciones manipuladas y el régimen del Porfiriato.
Voto de las Mujeres (1953)
Aunque las mujeres obtuvieron el derecho al voto en elecciones municipales en 1947, fue en 1953 cuando se reconocieron plenamente sus derechos electorales, gracias a las reformas constitucionales impulsadas por el movimiento feminista.
Primer Gran Reforma Electoral
A lo largo de las décadas de 1960, 1970 y 1980, se llevaron a cabo una serie de reformas electorales que buscaban promover el pluralismo político y combatir la hegemonía de un solo partido.
Estas reformas introdujeron cambios significativos, como la adopción de un sistema electoral mixto y el aumento de curules en la Cámara de Diputados.
Segunda Gran Reforma Electoral
Tras la polémica elección presidencial de 1988, se implementaron reformas en 1990 para crear instituciones electorales autónomas e independientes, como el Instituto Federal Electoral (IFE) y el Tribunal Federal Electoral (TEPJF), con el objetivo de garantizar la imparcialidad en los procesos electorales.
Tercer Gran Reforma Electoral
Estas reformas, iniciadas en 1993 y perfeccionadas en 1996 y 2007, se enfocaron en promover la equidad en la competencia electoral, regulando el financiamiento de los partidos políticos y el acceso a los medios de comunicación, así como fortaleciendo la capacidad fiscalizadora del IFE.
Cuarta Gran Reforma Electoral
En 2007, se nacionalizó la función electoral con la transformación del IFE en el Instituto Nacional Electoral (INE), con el fin de homologar los estándares de los procesos electorales federales y locales, y garantizar su imparcialidad y transparencia.
Estos hitos reflejan la evolución del derecho al voto en México y la constante búsqueda de fortalecer la democracia y garantizar la participación equitativa de todos los ciudadanos en el proceso electoral.






